¿PUNKS & SKINS?

Desde luego. Somos dos culturas y moviemientos diferentes, pero muy semejantes. Existen unos lazos muy estrechos entre los punks y los skinheads. Todos los skinheads nos relacionamos con punks, bien de fiesta o en nuestro propio grupo. Es algo que es así, y que tiene que seguir siendo así.

Pero siempre hay cosas que joden el movimiento. En los skinheads primero fueron los boneheads, luego los ambiguos... y en los punks llegaron hace tiempo los costras.

Podreis pensar que los punks siempre han sido gente de la calle, caótica, tanto en forma de pensar como de vestir. Bien, vale. Algo que nos diferencia es la forma de vestir. Nosotros somos elegantes y ellos van a su manera (a mí, personalmente, siempre me han gustado las chupas de cuero, las crestas y los pantalones escoceses).

Pero metiéndome en el tema que quiero tratar. Si no toleramos a los ambiguos ni a los fascistas, ¿por qué coño hay que tolerar a un sucio y drogadicto costra? Un costra NO es un punk. Un costra no combate, no se mueve, no milita, no hace absolutamente nada por el moviemiento, es más, lo único que hace es rebentarlo, y desde dentro.

Un costra es un hippie, con todas las letras, y me atrevo a decir que es incluso peor. Uno de nuestros valores, tanto de los punks como de los skinheads, es el odio, o por lo menos, el desprecio hacia los hippies.

La droga acaba con las personas, y está acabando y ha acabado con gente que antes estaba en la primera línea. Los costras la alaban, la tienen en un pedestal. Viven por y para drogarse.

Yo, personalmente, desprecio a una persona cuya meta en esta vida es drogarse para evadirse de... la sociedad, lo que sea. De todo al fin y al cabo. El verdadero espíritu punk es la rebeldía y el inconformismo. La lucha contra el sistema capitalista en el que vivimos.

A un vagabundo la vida le ha venido mal dada, es una verdadera putada. Hay mucha gente en la calle que tenía una familia, cariño, dinero, una casa, comida todos los días... y la vida le ha venido mal, y ha acabado, desgraciadamente en la calle.

Un costra tenía todo eso, y lo que ha hecho ha sido renunciar a ello para drogarse y vivir tirao, evadido del mundo, sucio, y lo peor de todo, torturando a un perro. Porque no he visto ningún costra sin un pobre perro en un concierto, desorientado, sucio y con enfermedades.

Los costras se están cargando el movimiento punk... es una pena, y es algo que hay que evitar. Tanto los punks como los skinheads, por que por algo somos Crestas&Rapados, somos uno.

Lo realmente gracioso es que van con la chapita de la esvástica tachada. ¿Cómo se puede ser tan hipócrita? Es un insulto hacia todos los antifascistas, tanto actuales como pasados.

NO FASCISTAS, NO AMBIGUOS, NO COSTRAS

PUNKS & SKINS UNIDOS